Por muchas generaciones, por muchas promociones de estupendos profesores y alumnos, personalmente, siempre me sentiré agradecido por el esfuerzo empleado en nuestra formación; siempre recordaré con cariño una etapa tan importante en nuestras vidas de adolescentes y primera juventud. Recuerdo con gratitud, a cada profesor y a cada compañero; algunos ya no están, pero sus voces todavía resuenan en mi memoria, además de sus lecciones, que no solo eran académicas, también nos formaban como personas responsables, ciudadanos para un futuro, que ha resultado más complicado de lo que esperábamos. Pero el esfuerzo siempre merece la pena; muchos de aquellos, más o menos, revoltosos alumnos, empezaron su etapa de bachiller, sin saber apenas nada sobre si mismos o sobre qué potenciales capacidades podían salir a la luz, y acabaron el último curso (COU), como pequeños hombrecitos y mujercitas, con las ideas ordenadas, y hasta con nuevas vocaciones que guiarían su siguiente formación con éxito, en un alto porcentaje.
Pedro celebró el 25 aniversario
Los tiempos cambian, y ahora son nuestros hijos o sobrinos, los que recorren las mismas etapas, las mismas aulas, muchas veces, sin ser conscientes del momento crucial que están viviendo, a todos los niveles. Yo los miro con cierta envidia nostálgica, porque nosotros tampoco éramos conscientes (a esas edades en que las pulsiones juveniles nos confunden), y quizás podríamos haberlo hecho mejor.
En mi familia, fuimos 3, los alumnos que nos formamos en las aulas del "Bergidum Flavium", que colaboramos con "Manolo, el de Historia", en la recreación del Templo romano. Y los tres, salimos con una vocación en nuestra mente, dos con vocación de matemáticos (ahora son ellos los profesores), y mi vocación de historiador, se me escapó, y la cambié por la Sanidad Pública.
¿Cómo no vamos a estar contentos y agradecidos? Y este es el mensaje que intentamos trasladar a todos los que tienen la gran oportunidad de formarse y aprender, con unos profesores y unas fuentes, hoy día, casi ilimitadas.
Gracias a todos por vuestro trabajo (muchas veces estresante o incluso frustrante), pero imprescindible y provechoso para la Sociedad.
NOTA: mensaje que nos envió Pedro López a través de Facebook
Palabras como las que nos dedicas, Pedro,nos reconfortan y nos hacen seguir trabajando con fuerza e ilusión en esta profesión tan bonita. Muchas gracias por tu reconocimiento. Un afectuosos saludo para ti y tus hermanos.
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